CECILIA SEGURA
Alicante 1974

Cecilia Segura, mallorquina nacida en Alicante en 1974, es licenciada en Historia del arte, técnico superior en Edición de arte y ha realizado el curso de estudios avanzados en la Universitat de Barcelona, dentro del programa de doctorado ‘Comunicación Arte Educación’. Ha sido becada en varias ocasiones para realizar estudios en el extranjero, asistiendo al Central Saint Martins College of Art de Londres. Ha realizado proyectos de intervención específica en diferentes espacios como Vibratio en la Zona Zero del Casal Solleric de Palma, El nido de Aracne en la sala de exposiciones de Picanya, Andrómeda en el Espacio Tangente de Burgos y Mundo-Loca en el Espai de vidre de Palma.

En las instalaciones de Cecilia Segura el espacio se ve transformado en un escenario de ideas, de conceptos, de narrativas en las que el espectador participa activamente, deambulando alrededor o a través de los elementos propuestos, construyendo su propia lectura a partir de las claves que ofrece la artista. Sus obras se inspiran directamente en el paisaje contemporáneo, en la estética de las grandes áreas urbanas y en los medios de comunicación, donde predominan las formas vertiginosas, los colores vibrantes y la presencia constante de luz.

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SPACE INVADERS

Space Invaders fue inventado y programado por Toshihiro Nishikado en 1978. Considerado como uno de los videojuegos más importantes de la historia fue el precursor de los videojuegos modernos. De igual forma, la película de Disney de 1937 marcó una nueva etapa en el terreno de la animación, en cuanto a innovaciones técnicas y artísticas. Hoy en día la película Blancanieves también es considerada por muchos una obra maestra del cine.

De la unión de estos dos fenómenos audiovisuales surge Snowy Invaders, un proyecto creativo que aúna a partes iguales cuentos de hadas, píxeles y buenas dosis de surrealismo. El proyecto pretende conseguir la transformación del cuento original en un fenómeno tecnológico de estética más actualizada, a partir de su fusión con el famoso videojuego de marcianitos de los años 80. Como resultado, una propuesta interactiva que le da un giro divertido a la historia, superando así el carácter folclórico, machista y moralista que tiene el relato, para conferirle un toque más geek.

Ficha técnica

Año de producción 2013

Máquina arcade:
Contrachapado de haya, césped artificial, equipo informático y videojuego. Construida y ensamblada a mano.
Medidas sin el césped: 50 x 75 x 177 cm

Tapices:
Lana merino y acrílica bordada a mano, a medio punto sobre cañamazo.
Medidas enmarcados: 112,5 x 86,5 x 7,5 cm.

Link al videojuego

Para probar Snowy Invaders en tu ordenador accede al siguiente link y haz primero un click con el cursor sobre el centro de la pantalla para activar el programa, luego pulsa barra de espacio para iniciar la partida.

http://www.ceciliasegura.es/snowyinvaders/

Para jugar, usa la barra de espacio para el disparo y las flechas izquierda derecha para mover a Blancanieves.

OMAR CASTAÑEDA
Colombia

FOOD OF WAR 

www.foodofwar.org 

Food of War (Comida de Guerra) es un colectivo multidisciplinario de artistas fundado por dos creativos Colombianos, Hernán Barros y Omar Castañeda. El Colectivo está radicado en Londres y se dedica a explorar la relación entre la comida y la guerra a través del arte. Simone Mattar, Zinaida Lihacheva, Quintina Valero y Carlina Muñoz han participado activamente de varias propuestas del colectivo.

Es una iniciativa sin fines de lucro, cuyos objetivos incluyen la producción de obras de arte y eventos con el fin de generar conciencia sobre el impacto de los conflictos armados alrededor del mundo, promover a los artistas que desarrollan su trabajo en torno a este tema, y fomentar el uso de alimentos como parte de la experiencia del espectador.

Desde que nacimos, alguien mas tiene el poder de decidir que comemos. Lo que ingerimos es impuesto por otra persona y rendimos todas nuestras decisiones a nuestros proveedores de alimento hasta que decidimos emanciparnos. En esta aparente libertad, nos rendimos a lo que nos rodea, a la ciudad, al país, a los grupos que elegimos pertenecer. Dentro de tales grupos hay normas de etiqueta referentes al ritual de comer. Como lo hacemos, cuando, que usamos para ello, donde, con quien y el porque, todo cambia de acuerdo a los tiempos en que vivimos.

Huelgas de hambre, desordenes alimenticios, hambrunas, todo esto esta ligado a luchas de poder entre el individuo y la sociedad. Los conflictos armados son el escenario extremo donde esas luchas se desarrollan en si y el comer esta en el centro de todo ello. Una guerra cambia la forma en la que comemos no solo por el racionamiento alimentario y/o por la amenaza psicológica de hambruna.

Comida y Guerra van de la mano, presentes en nuestra vida diaria y están en todas partes:

Las comida enlatada fue desarrollada por Napoleón para alimentar a sus tropas en las invasiones y luego perfeccionada por el Imperio Británico, los Noruegos se convirtieron en Pescatarianos a la fuerza cuando los Nazis ocuparon su país por un lustro y tomaron todo el ganado y producción avícola, y actualmente, Vladimir Putin tiene actualmente una lista de alimentos que el considera anti-Rusos.

Si somos lo que comemos, entonces todos somos Comida de Guerra.

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HUMUS – LA TIERRA PROMETIDA

El origen de Humus no es del todo seguro, pero se supone que vienen de algún lugar en la región árabe. Israel, como nación, lo tiene como su plato nacional, que al parecer ofende a muchos árabes. Para los Israelíes, es más un plato principal. Al contrario, en el Líbano es una guarnición o un aperitivo. Las diferencias también están acerca de la cantidad de tahini, la inclusión de algunos de los ingredientes y la hora de ingerirlo.

Los Israelíes hicieron para el Record Guinness, el humus mas grande que se haya servido pero un año después, en 2010, los libaneses tomaron de nuevo el record al servir un humus de más del doble en tamaño, que era superior a 10 toneladas. Israel ha logrado comercializar el humus en el extranjero muy bien, especialmente en el mercado de Estados Unidos, mientras que los libaneses están tratando de otorgar al humus un estado de denominación de origen protegida.

Los ganadores escriben la historia y los que sucumben en la batalla serán despojados de su legado. Es allí, donde se establece la importancia del humus como trofeo. El Humus es una tradición popular que cubre un territorio muy grande y al ser reconocido como suyo desde un bando, el otro lado se arrodillará a los «legítimos propietarios» cada vez que lo deguste.